Poner normas y límites a los niños

Educar a los niños y conseguir que las normas y límites se asuman de forma instantánea es una tarea que consume mucho tiempo y energía, entrega y dedicación. Esta tarea requiere serenidad, para ser firmes sin humillarlos o agredirlos, lo que supone un gran esfuerzo para los padres, pero todo el trabajo que les dediquemos a los hijos en los primeros años de la vida, será tiempo ganado para el futuro y sobre todo, para la temida adolescencia. La inmediata obediencia a unas normas funciona igual de mal que las dietas rápidas, quizá den algún resultado, pero este no es duradero. Con el comportamiento ocurre lo mismo. Es necesario que los cambios se produzcan lentamente, que las conductas adecuadas se vayan logrando poco a poco para que, finalmente perduren. No se puede educar sin límites, sin normas. Sólo si se educa a los niños día a día, desde que son pequeños, y nos convertimos en modelo de conducta para ellos, conseguiremos que interioricen y asuman las normas. No podemos renunciar a darles esa formación que les permitirá adaptarse a una sociedad con sus propias normas y sentirse integrados en ella, convirtiéndose en personas independientes, responsables y felices. El tipo de autocontrol que enseñemos a nuestros hijos irá evolucionando a medida que vayan creciendo.

Cómo elegir juguetes adecuados

Los niños aprenden jugando. El juego desarrolla su mente, y su cuerpo, estimulando su creatividad. En estas fechas navideñas, donde consumimos más que nunca juguetes, los padres debemos ser conscientes de que no todos son adecuados ni presentan la misma calidad.

Antes de elegir un juguete debemos tener en cuenta una serie de premisas básicas:

Decoración navideña

Como todos los años nuestra profe nos da un motivo navideño sin decorar, para que toda la familia, papás y hermanos nos pongamos a trabajar. El año pasado pudo implicarse también el papá y el resultado fue espectacular. Decoramos una bola de Navidad, con papel brillante, pintura roja, spaguettis y lentejas.
Comenzamos utilizando pintura roja de dedos para darle color a la bola. Luego recortamos papel brillante para dar otra textura diferente a la manualidad y por último, recortamos, aprovechando una caja vacía sin usar, 3 círculos de cartón, que luego pintamos de color verde, amarillo y azul. A continuación,  pegamos en el contorno de la bola los spaguettis y lentejas, a los que previamente le hemos puesto una mano de pintura de color amarillo. En el colgador de la bola hemos puesto un algodón con pegamento de purpurina y estrellas doradas y dos cascabeles de un llavero, que había en casa. Como fondo, con una máquina perforadora recortamos circulitos de diferentes colores en papel charol, que posteriormente pegamos. Asimismo, también usamos una figura de pasta con forma de espiga que remojamos en pintura roja para decorar la parte inferior y embellecer, más si cabe, la manualidad y una tira de papel brillante para escribir el nombre y los apellidos de nuestra pequeña artista.
El marco lo hemos hecho con un cartón, al que le hemos dado esa forma y lo hemos pintado de color rojo. En la esquina con pos it de varias tonalidades hemos hecho la forma de una flor y en el centro, la imagen de nuestro tesoro más preciado: nuestra hija. Entre el marco y el dibujo hemos pegado con cola un cordón, para darle más profundidad y relieve.
Y así de bonita nos quedó:


Este año el motivo navideño propuesto desde el cole ha sido un cirio o vela.