Los belenes bidimensionales en papel para colgar en un corcho o pizarra o en la pared es de lo más socorrido, pero también de lo más bonito que se puede hacer para embellecer el colegio y como muestra, un botón. En este belén no falta detalle. Nacimiento, Reyes Magos, ángeles, y pastores, pintados por cada uno de los alumnos, y pegados sobre papel azul, y adornados con espumillón dorado.
Otra alternativa es montar el belén tradicional de toda la vida, con sus figuritas. Los hay más grandes o más pequeños, pero en todos, hay un denominador común, el cariño con el que sus artífices lo han montado.
En nuestro colegio han creado este año un original árbol, envolviendo sobre un paraguas entreabierto, una tela brillante verde, que han adornado con campanas recicladas hechas con cápsulas de café, fijadas a la tela con cintas y alfileres y espumillón plateado y azul, rodeando el contorno del árbol.
En la guardería las puertas de las clases han sido adornadas con árboles, regalitos, Papá Noel o la mascota de la editorial del libro que llevan en clase. En cada uno de esos detalles, la mayoría confeccionados en cartulinas y papeles de diferentes tonalidades, texturas, y colores, se transluce el esfuerzo y dedicación del equipo docente para alegrar y llenar de colorido y espíritu navideño, el centro dónde nuestros hijos pasan muchas horas.
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